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Top Tuqueras: Sicarias del cierzo

Si os digo “Roller Derby” muchos de vosotr@s no vais a saber de qué hablo. Si os digo que en Zaragoza (y en muchas otras ciudades) hay un grupo de mujeres que varias veces por semana se suben a unos patines para favorecer valores como el compañerismo, la inclusión y el esfuerzo, la cosa suena mejor.

En los equipos actuales de Roller Derby, además de los valores que lleva implícitos la práctica deportiva, se intentan promover la igualdad y el compañerismo, actitudes indispensables para formar parte de ellos

El Roller Derby es un deporte femenino, de momento minoritario, parecido al rugby que se practica sobre patines. En este artículo voy a explicaros en qué consiste y, quién sabe, quizás os pique el gusanillo…

¿En qué consiste el Roller Derby?

El Roller Derby contemporáneo resurgió en Estados Unidos en la década de 2000, aunque se originó inicialmente en la primera mitad del S.XX. Se trata de un deporte de contacto, velocidad y estrategia que se juega sobre patines tradicionales en una pista ovalada similar a las de atletismo.

La jammer lleva una estrella en el casco como distintivo
Un árbitro señala cada punto anotado por la jammer

Sobre esta pista compiten dos equipos de 5 miembros cada uno: 4 bloqueadoras (defensas) y una jammer (anotadora), que patinan en sentido contrario a las agujas del reloj. El objetivo es que la jammer del equipo rebase en cada vuelta a las bloqueadoras del equipo contrario, anotando de esta manera un punto. También hay una bloqueadora destacada, la pivot, que se podrá convertir en jammer a lo largo del juego.

Ganará el equipo que más puntos obtenga al final del partido.

Las reglas del juego

Un partido de Roller Derby consta de dos tiempos de 30 minutos que, a su vez, se dividen en pequeños periodos de 2 minutos cada uno llamados jams.

Se requieren al menos 3 árbitros por jam

Al comienzo de cada jam los dos equipos empiezan a patinar. La zona de juego se delimita a 6 metros por delante y 6 metros por detrás de la jammer. La anotadora de cada equipo intentará rebasar la línea de las bloqueadoras, llamada pack, que pueden utilizar contacto físico reglamentado para impedírselo.

Tras pasar el pack por primera vez, la jammer anotará un punto para su equipo cada vez que rebase legalmente la línea de la cadera de una bloqueadora. Para impedir esto, ayudar a su jammer o mejorar su colocación táctica, las patinadoras pueden empujar a su rival fuera del área de juego y bloquearla física o posicionalmente.

El contacto con codos, cabeza y pies está prohibido, tampoco se puede bloquear por encima de los hombros o por debajo de la mitad del muslo. No está permitido utilizar las manos para agarrar a la contrincante ni contactarla por detrás, sólo por los costados o el frente

Al final de cada jam las patinadoras tienen 30 segundos de descanso o para cambiar las componentes del equipo que jugarán el siguiente tiempo.

La equipación necesaria

El Roller Derby se juega con patines tradicionales (cuatro ruedas paralelas distribuidas en dos ejes). Las patinadoras, además, deben estar protegidas con casco, rodilleras, coderas, muñequeras y protector bucal. También suelen utilizarse espinilleras, sujetadores con cubiertas y protectores de barbilla.

Son necesarias también dos cubiertas de casco para identificar en pista las posiciones especiales: la jammer lleva un casco con una estrella a cada lado y el de la pivot debe mostrar una franja a lo largo.

Las Sicarias del Cierzo

El Roller Derby es un deporte autogestionado y autofinanciado que está ganando gran popularidad en los últimos años gracias a sus valores diferenciales: deportividad, inclusión, diversidad, empoderamiento femenino y trabajo colaborativo, entre otros.

La primera liga de Roller Derby española se fundó en Tenerife en 2010, seguida por la de Barcelona; actualmente hay equipos en más de veinte ciudades españolas

Si Tenerife fue la primera ciudad en España en contar con una liga de Roller Derby, podemos decir que Zaragoza es la más orgullosa de sus Sicarias patinadoras.

Sicarias del Cierzo, viento aragonés por excelencia, es el nombre que recibe el equipo maño de Roller Derby. Nació en 2012 de la mano de unas pocas jóvenes, las justas para poder competir, que decidieron reunir deporte, amistad y diversión sobre patines y que hoy en día ya cuentan con más de 30 rolleras.

Se trata de un grupo de personas muy diversas, con profesiones y perfiles diferentes, cosa que las enorgullece y enriquece.

Entrenan dos veces por semana en el Pabellón Deportivo de Garrapinillos, sede del equipo y de la mayoría de los partidos locales. Anualmente juegan varias competiciones, a nivel español y europeo,  participan en masterclass y boutcamps y promocionan su deporte y el equipo a través de charlas en asociaciones y centros culturales.

X Aniversario de las Sicarias del Cierzo

El pasado día 5 de noviembre tuvimos el privilegio de colaborar con las Sicarias del Cierzo en la organización del scrimmage conmemorativo de su décimo aniversario. Se trata de un evento deportivo al que estaban invitados todos los clubes de Roller Derby de España y que fue todo un éxito, tanto en desarrollo como en participación.

”Patines y Cerveza” es el grito de guerra de las Sicarias del CIerzo

La jornada comenzó con un desayuno saludable y animación musical, para dar paso a la primera de las competiciones, la de los equipos en nivel iniciación. Siguieron las patinadoras de nivel medio hasta llegar a mediodía, momento en el que contamos con la impagable colaboración de La Piparra y sus exquisitos bocadillos veganos. 

Por la tarde las rolleras de nivel pro ofrecieron un gran espectáculo de técnica, competitividad sana y compañerismo; deporte en estado puro, en definitiva. Terminamos el día con la entrega de premios y una merecida ovación generalizada para todas estas mujeres que se esfuerzan por trasladar al deporte valores como la inclusión, la tolerancia y el trabajo en equipo.